domingo, 20 de mayo de 2007

La amistad

La amistad. Parece que en nuestra sociedad de hoy es obligado, si eres un tipo integrado en la sociedad, tener muchos amigos. Si tienes pocos o ninguno, entonces debes ser un tipo raro, algo pasa contigo. Pero si te pones a escarbar y rascar un poco en la superficie, descubres que la mayoría no pasa de la superficie. Que el concepto de amistad es uno más de todos esos conceptos etéreos con el que todo el mundo se llena la boca y con el que todo el mundo presume, pero si preguntas un poco hondo, si esperas, te das cuenta que la mayoría vive estereotipada, sin tener claros los conceptos fundamentales, lo que significan para cada uno y qué exigen y qué ofrecen en cada uno de ellos.

La amistad es uno de esos conceptos que engloba demasiadas cosas de las que este mundo que tenemos ahora carece: carece del valor de la palabra, carece del valor de la compasión, carece de la capacidad de empatía, carece de la capacidad de ver al otro, de la necesidad de ponerse en la piel del otro, del valor de escuchar, del valor de compartir, de la necesidad de acompañar y estar acompañado y sobre todo, de la valentía de aceptar al otro y a tí mismo como realmente es y eres.

Sorprende, pero la mayoría de nosotros, no estamos dispuestos a tener verdaderas relaciones de amistad. Porque eso nos haría enfrentarnos con nosotros mismos y nuestro interior. Y el recogimiento y el trabajo de nuestro interior (inconsciente que dirían algunos)asusta...mejor me quedo en la superficie...estoy cómodo...no me pidas mucho...te daré lo que todo el mundo...son las reglas del juego.

Y entonces, por el miedo al que dirán y sobre todo, a la soledad, nos prostituimos en relaciones que arañan nuestro corazón y nuestro interior, cada minuto del día, y nos convertimos en zombies que sólo quieren huir, cada minuto del día, del profundo asco que sienten y que disfrazan ese sentimiento, con cualquier tipo de adicción: al trabajo, al sexo, a las emociones fuertes, al budismo, al hinduismo, al karma tántrico, etc...y entonces tenemos una sociedad descrita perfectamente en los libros de Houellebecq.

¿Alguien quiere romper las reglas del juego y atreverse a ser uno mismo?

6 comentarios:

Anónimo dijo...

La amistad como tal concepto, es una UTOPIA.
Para mí una cosa son los AMIGOS y otra la AMISTAD.
Los valores de la amistad los destruyó hace mucho tiempo el mundo, con sus mal llamadas "capacidades".
La mayoría de nosotros no estamos dispuestos a tener verdaderas relaciones de amistad, no solo porque nos tendríamos que enfrentar con nosotros mismos, ni con nuestro interior, ni con nada que se le parezca al valor y a la valentía de sacar tu yo y aceptar otro paralelo. Yo creo que la razón es más simple que todo esto.
Para que la amistad tenga validez y deje de ser un concepto, debería ser lo que haría nuestro pensamiento cuando en vez de poner la experiencia delante, pone el sentimiento, y entonces, hoy por hoy, tienes la obligación de empezar a diferenciar entre AMIGOS y AMISTAD.
Los principios del budismo y del hinduismo como tal teorías creo que son buenos, y que la mayoría de ellos, aunque no los practicamos, conforman la filosofía de las personas. Por tanto, yo no diría que se pueda establecer una adicción a esos principios, sino más bien una forma de guardar y proteger tus ideas y sentimientos poniendo por delante el "escudo" del ¿KARMA?, que ahora suena fuerte y está muy de moda, pero que algunas veces ¿sabemos muy bien lo qué significa y lo qué es?.
Voy a añadir a esto un pensamiento mío, que ustedes pueden meditar y discutir.Pienso que es un pensamiento demasiado sencillo, pero si lo estudian despacio, tiene mucha filosofía, y podíamos hablar largo y tendido sobre él:
"Quién no se molesta, no piensa; ni puede ni quiere imaginar. Y el no imaginar es malo. ¿Se imaginan una vida (su vida), una flor, un árbol, una hierba... sin IMAGINAR...".
Y por si ese no les ha parecido oportuno, pueden estudiar este otro:
"El saber y el buen vivir, antes eran compañeros. El buen vivir sigue ahí y el saber se volvió ¿ligero...?.

23 Mayo 2007
Rocío del Alba

Unknown dijo...

Cuando a la gente le dan miedo los sentimientos...sólo le queda el pensamiento.

Todos los principios de todas las filosofías y religiones son buenos. Lo que no es bueno, es lo que algunos hacemos con esos principios...

El saber se volvió...muy ligero...

Anónimo dijo...

Vamos a quitar el MIEDO.

Según yo lo entiendo, el miedo es un concepto bastante estéril.
La gente tiene miedo del propio miedo y del miedo de los demás. Pero cada uno tiene el miedo que quiere y puede tener.
La persona debe estar continuamente en un grado consciente de evolución, para poder hacerse cargo de todas las respuestas que el universo le reserva.
Si en ese grado de evolución consciente se cuela el miedo, entonces podemos llegar a la destrucción y al desorden total.
¿Qué cómo se evita esto?. Pues yo creo absolutamente en la energía del universo. Por eso cada persona debe tener un plan y una forma para recargar la energía que perdió. Porque el miedo, o mejor dicho "los miedos" son energías perdidas, que no se han destruido y nos acechan en cualqier momento.
Si se recarga esa energía, al mismo tiempo se regenera y los miedos se liberan.
Míralo así:

Recargar energía
Regenerar lo bello
Liberar los miedos.

Los sentimientos son conceptos bastante abstractos que están en el plano del subconsciente, por lo tanto no deben tener miedo.
Si a través de la energía regeneras lo bello (incluso puede servir en su momento una concepción mística del universo), la naturaleza envuelve los sentimientos con un tupido velo, para que sigan su grado de evolución. Y a partir de aquí, una cosa es que los expongas (¿por qué no?) y otra muy distinta es que los manifiestes.
Incluso pienso yo que exponiendo a la luz tus sentimientos se puede llegar a una forma más ¿lógica? de pensamiento, para que se pueda formar esa ETICA que debe existir entre los humanos para tratarnos unos a otros con objeto de facilitar también la evolución tuya y de los demás.
Y si lo consideráis oportuno, pensad, y sobre todo tú mi querida Electra, que parece que te preocupan los miedos:
"Con el pensamiento se forma la vida. ¿Podrán los miedos de la vida destruir lo que tanto le costó organizar al pensamiento?".

28 Mayo 2007
Rocío del Alba

Anónimo dijo...

Permitidme un apunte que elaboré sobre esto del miedo, y que visto así, a lo mejor el miedo se podría corregir, siempre y cuando se trate de un miedo, miedo.

la transformación contínua y constante nos lleva a apreciar más la belleza cada día. apreciando esa belleza, regeneramos y recuperamos la energía, y al recuperar la energía se producen vibraciones entre los átomos de nuestro cuerpo, y así aumentará la belleza del entorno y también las condiciones espirituales.
Así visto, esto , casi sería atravesar la barrera que hay entre la vida y la muerte. Pero si cuando estamos en ese nivel de vibración aparece algún miedo, cualquiera que sea, éste rebaja muchísimo ese nivel de vibración envejece la energía y la destruye, y al final desaparece con lo cual nos quedamos solo en la tierra y nada más, y otra vez vuelta a empezar.

¿Sabeis cual es el único miedo que debería preocupar al hombre?. El miedo a lo desconocido en ese paso que hay entre la vida y la muerte.
Y puestos a pensar... Pensar en como vencerían "los Mayas" ese miedo porque si desaparecieron en bloque sería por alguna transformación así, digo yo.

Otro día os cuento una experiencia que me contaron sobre esta transformación, que se ajusta mucho a mi teoría. A ver que opináis. Mientras tanto, un pensamiento:

"Si la belleza genera belleza y la energía genera energía; ¿por qué en el planeta viven tan separadas que una y la otra están malheridas?.

2 Junio 2007
Rocío del Alba

Unknown dijo...

Bueno, contesto al último comentario de Rocio del Alba...partiendo de una visión positiva de la vida entiendo todos tus argumentos y los comparto.

El caso es que la vida es positiva y negativa...y la belleza, generalmente, no genera belleza...en los demás puede generar todo tipo de sentimientos negativos, que empiezan por la conciencia de no ser tan bello como el otro, y lo que no se posee se trata de destruir...hacemos de todo, menos aceptar las cosas y las personas, tal y como son.

El hombre es un animal que se compara, constantemente, y que compite...y esa competencia puede ser buena y puede ser mala...y la mala es la que más abunda. Sobre todo, si las cualidades objeto de comparación no son adquiribles...inteligencia, belleza (aunque esta ahora casi sí es adquirible, aunque sólo la física, la espiritual...no), riqueza (material y espiritual),...y entonces tenemos a millones de personas, empleando todas sus energías en competir para igualar (los menos) y en competir para destruir (los más)...

Anónimo dijo...

Un APUNTE

Permíteme Electra hacer un apunte al último comentario que hiciste.

Yo doy por supuesto que la vida es positiva, porque si no..., pero también es negativa. No existe lo bello sin lo feo, ni lo bueno sin lo malo; lo que ocurre es que cada cual se queda con lo que más le interesa, y nunca debe ni puede pesar más lo negativo que lo positivo en la vida.
La palabra BELLEZA es un canto al brillo de lo natural. ¿Y con qué brilla lo natural?. Con la energía del cosmos. Y me vas a perdonar, pero yo soy una acérrima defensora de este concepto. Si lees despacio estas 3 palabras:

BELLEZA - ENERGÍA - NATURALEZA

El concepto brilla por si solo. Pues en este esquema tan básico, se basa la vida.

Lo que este planteamiento pueda generar en los demás, es un problema de ellos, no nuestro. No importa no ser tan bello como el otro, ni tan delgado como el otro; no importa no ser tan, tan como el otro. Importa ser...YO.

Una vez traté yo de ser tan, tan como lo que se consideraba una belleza ideal, y después de muchas privaciones, sacrificios y demás, me di cuenta de que además de no ser más bell@, ni más delgad@, ni más alt@, había conseguido sacrificarme para nada, amargarme para nada y deprimirme para nada. Por eso decía yo por ahí en otro comentario que cada uno debe aceptarse como es, y entender la felicidad como un grado de estar contento contigo mismo. Y eso no te lo va a buscar nadie. Eso tienes que entenderlo tu mismo.

Tenemos unas neuronas cerebrales y unas áreas en el cerebro. De lo que se trata es de conectar cada neurona con su área correspondiente, y vivir de acuerdo con lo que ellas dicten, y no con lo que dicten los demás. Claro está, respetando lo que cada uno entienda al respecto.

Dices y dices bien que el hombre es el animal que más compite (para eso tiene inteligencia), y también dices que eso es bueno y es malo. También es verdad. También es verdad que abunda más la mala: ¿por qué?. Pues porque cuando una cosa (idea, belleza, inteligencia, amabilidad... conceptos abstractos totalmente personales) no se pueden adquirir, en el hombre funciona una historia que se llama "envidia", que es más perversa que los "miedos".
Los miedos arruinan a una persona, pero pueden aminorarse e incluso desaparecer. Con la envidia se nace, se vive y se muere, y esto si que arruina la vida de los demás, porque tienes que concentrar tu energía en librarte de ella. ¿Y lo demás, que puedes hacer con la energía?. ¿Dónde está?.

Por eso yo pienso que no se debe competir para igualar nada, ni para destruir nada. Se debe competir psara llegar a ser más, para subir peldaños y ascender de nivel en ese desarrollo evolutivo que, como Ser Humano, deberíamos de llevar, para al final alcanzar el grado de energía que nos mantenga por encima de los demás.

La Energía Sagrada procede (según se ha demostrado) de nuestra conexión con aquello que hay de divino en nuestro interior.
Pues entonces, la Energía Física que es la que procede de la naturaleza, conectará con lo físico de nuestro interior.
Y la Energía Espiritual que es la que procede del cosmos conectará con nuestros sentimientos.
Y digo yo que si juntas las tres, tendrán que servir para competir en conseguir cosas bellas, naturales, emocionales y también riqueza (¿por qué no?), material y espiritual. Nunca van a servir para destruir nada.

"Tú eres Tú, y los demás son sus posibilidades". Allá cada cual con esas posibilidades.

Así, pienso yo, se deberían generar las estructuras mentales de las personas de cada país, y entonces los odios entre las distintas etnias no tendrían lugar. Pensad en que si la cultura es contagiosa, ¿Por qué no competimos por alcanzarla?.

Ahora me podreís decir que yo vivo en un mundo irreal. A lo mejor si, pero a lo mejor también es que tendríamos que ir pensando un poco en aquel mundo ideal, para no agredirnos incluso a nosotros mismos.

Pensad un poco en que cuando uno mantiene una imagen negativa demasiado tiempo, puede acabar haciéndose realidad.

Y mientras discurrís y no, un pensamiento:

" Si la belleza no genera belleza y los sentimientos se entremezclan con cualidades que no pueden ser adquiridas; el Ser Humano ¿en qué nivel estará?. ¿Estará progresando en su nivel de energía, o llegará a ser algo antinatural...?.

7 Julio 2007
Rocio del Alba