domingo, 25 de enero de 2009

Mirar hacia dentro

En mi mundo nadie mira hacia dentro. Todos miran hacia afuera. Sus ojos siempre están abiertos y siempre miran el mundo. Sólo cierran los ojos cuando duermen.

Debido a esto, yo creía que sólo se podía mirar hacia afuera. Mirar para ver, mirar para construir. Mirar para entender.

Sin embargo, cuando cerraba los ojos, al ir a dormir, percibía otro mundo y otra realidad. Entraba en otro mundo. Un mundo que sólo existía con los ojos cerrados.

Era sorprendente, porque nadie me había comentado nada de este otro mundo. Un mundo fantástico, caótico, impredecible. Vivía mil aventuras y percibía mil cosas que no percibía con los ojos abiertos. Y lo que era más importante, podía entender, a veces, cosas que no había entendido con los ojos abiertos.

Así que...empecé a cerrar los ojos en pleno día, a cualquier hora y en cualquier sitio. Y entonces, descubrí que podía mirar hacia dentro, además de hacia afuera. Percibía sensaciones, percibía emociones, percibía cosas de mí mismo, que eran impensables cuando miraba hacia afuera.

Y la sensación era adictiva, ya que, cada vez que cerraba los ojos, aquél que yo podía llegar a ser, se hacía presente. Cuanto más tiempo tenía los ojos cerrados, tanto más cerca se le percibía. Hasta que abría los ojos. Entonces, desaparecía de un plumazo. Y sólo quedaban los otros. Y el mundo.

Llegué a un pacto conmigo mismo. Estaría la mitad del tiempo mirando hacia dentro y la mitad del tiempo mirando hacia afuera. Así, podría entenderme y podría entender el mundo. O al menos, lo intentaría a partes iguales...

Pero...no pude...la sensación de estar dentro de mí, cuando tenía los ojos cerrados, era tan fuerte, que no podía dejar de pensar en ello, así que...empecé a cerrar los ojos las dos terceras partes del día y luego llegó el día en que cerré los ojos para siempre...para mirar siempre...dentro de mí...y la oscuridad se hizo presente...y con ella...la indefectible consciencia de mí mismo...y del mundo y los otros...dentro de mí mismo...

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Eso es lo que hace el mundo, mirar hacia afuera.
Pero al mirar hacia dentro se ve otra realidad. Es como si la realidad de la vida terminara y empezara la realidad del pensamiento.
Eso lo hace la meditación, a la que se llega sin necesidad de emplear ninguna técnica.
El otro día, estando con mi amiga en un ratito de "meditación compartida", abrí los ojos, la miré y en realidad vi la cara de ella, pero distinta y especial. Después que dimos por finalizada la meditación, le hablé de lo que había visto y mne dijo:
"Para buscar dentro de tí o de... hay que lograr una unión virtual? entre el poder de la mente y el poder onírico del pensamiento. Esa unión es lo que tú viste"
la conversación se alargó luego por espacio de 2 horas. Ella les podría enseñar a mirar hacia dentro y a juntar o separar la realidad tangible con lo irreal de sus mentes.
Ahí me enteré yo un poco de esa práctica de mirar hacia dentro.

Existe otro mundo en nosotros por el que es más fácil navegar que por éste. En el que existen soluciones para casi todo; y lo más sorprendente es que también existen soluciones para manejar un poco la realidad presente.
Según mi amiga, ella soluciona así muchos problemas. Más o menos como hacía Buda en su tiempo. pero controlando el tiempo con las dos realidades que tienes delante. Y ahí llega lo difícil.
la meditación y el mirar hacia dentro se deben utilizar, según yo pienso, para tratar, en lo posible de arreglar nuestra situación real presente. Todo lo que pase de ahí, ya es descompensar la realidad de este mundo, que al fin y al cabo es donde vives y donde tienes que cambiar las situaciones.

"Si nuestro pensamiento se rompe y ese hilo lo coge la realidad. Llegará un momento en que a esa realidad le falte un enganche, y entonces el pensamiento nunca la va a poder liberar".

Ahora piensen ustedes en como se podría unir la realidad y el pensamiento.
¿Tendrían unión?.

Rocío del Alba
1 Febrero 2009

Anónimo dijo...

Si lo tienen a bien, quería decirle dos cosas a Rocío del Alba:
1ª la realidad y el pensamiento nunca se podrán unir. La realidad tiene el límite material de este mundo y el pensamiento es una facultad libre, de una mente libre. Por lo tanto no les veo mucha unión.
2ª Tu amiga, con cuatro palabras ha expresado la mejor definición que he leido yo sobre el "YO Interior". ¡todos teníamos que tener un amigo/a así!.

Referido a tu comentario Electra, te diré que la psicología hace muchos años que experimenta con estas técnicas. Lo bueno del caso es usarlas. Y lo malo es que solo se usan cuando uno se encuentra con algún problema. Y entonces es difícil usarlas. Es difícil encontrar ese punto de unión entre la mente y el pensamiento.
Hay personas que incluso cuando duermen, no miran hacia su interior, pero sí su interior se empeña en que lo conozcan por medio de los sueños. ¿Sabían ustedes que en la fase rem de la dormición se construyen muchas soluciones a nuestros problemas?. Solo hay que saber interpretarlas, y no es tan difícil. Pero hay personas que se empeñan en no hacer caso de ellos, incluso se hacen verdaderos esfuerzos por olvidarse. ¡Y ahí está el error!. Grave error.

Por cierto Electra este fotograma nuevo no se me parece a ninguna estrella, pero tiene cierto aire de nobleza.

TAHI
4 Febrero 2009

Anónimo dijo...

LA MIRADA AL INTERIOR

Hola Electra, OK por el tema . Ni más ni menos que la mirada al interior . Ese es nuestro mundo , nuestro pequeño mundo , más propio , más íntimo , más verdadero y más creativo . ¡Ojala todos dedicáramos un tiempo diario a esta mirada ! , ¡ cuantos beneficios obtendríamos de este pequeño tiempo !.

Fdo.- Argonauta.

Unknown dijo...

Mirar hacia dentro tiene muchos puntos de vista, de los que yo destacaría algunos, todos comentados por vosotros:
1) Meditación
2) Observación de los sueños
3) Pensar en uno mismo y sobre uno mismo

No he practicado todavía la meditación, creo que todavía no estoy preparada para ello, pero sí doy importancia a los sueños y sí pienso sobre mí misma.

Pensar en uno mismo no desde el punto de vista egoísta, sino desde el punto de vista de ver quién eres, qué quieres, qué errores cometes, qué necesitas mejorar, qué necesidades tienes, si vas por el camino que te gustaría, si te sientes a gusto con quien eres y con el mundo que te rodea...

Observar los sueños...dicen que nuestro cerebro lo registra todo y que una parte del mismo, condicionado por nosotros, por nuestras experiencias, por nuestras creencias, por nuestra educación...sólo nos damos cuenta consciente de una pequeña parte de ese registro. Es debido a nuestro modelo mental. Por la noche, cuando soñamos, cuando no estamos condicionados, podemos acceder a todo lo registrado durante el día...y así comprender cosas y comportamientos que de otra manera pasarían inadvertidos para nosotros...pero, ¿cómo recordar luego y cómo aprender de ello?

Anónimo dijo...

Existen distintas técnicas para recordar los sueños.
Haciendo esta salvedad, diré que a mí, la técnica que mejor me funciona es la de hacerle caso a mis sueños, aunque sea uno pequeño y a poco que me acuerde.
Es decir; la principal técnica es esforzarse por acordarse de lo que has soñado, y cuando te acuerdes de algo, anotarlo. Y así un día y otro y otro.
El "Método Silva" en el libro que trata sobre el control del Estrés y desarrollo mental, dedica un apartado a este tema de las técnicas para recordar los sueños.
Alguna vez he seguido esa técnica y funciona, pero creo que lo fundamental es ser perseverante y día a día anotar y anotar todo lo que te acuerdes sobre lo que has soñado. Así cada día recuerdas mucho más. Sabéis aquello de que "el cerebro no duerme, solo se adormece".
Otra cosa es interpretar lo que has soñado. Y con toda la psicología que sé, y lo que Freud me ha enseñado, muchísimas veces no soy capaz de descifrar las comparaciones que veo en mis sueños. Pero estoy en ello. Su estudio ¡es impresionante!.

TAHI
9 Febrero 2009

Unknown dijo...

Totalmente de acuerdo. El estudio de los sueños es apasionante.

Muchas gracias por tus recomendaciones.

Unknown dijo...

Os adjunto un breve comentario sobre la meditación, que he encontrado en un libro de Peter Mathiessen (explorador), que estoy leyendo:

La meditación

Cuando cuerpo y mente son uno, el ser en su totalidad, completamente libre de intelecto, de emociones y de los sentidos, puede abrirse a la experiencia de que la existencia individual, el "yo", la "realidad" de la materia y los fenómenos no son más que una pasajera e ilusoria distribución de moléculas. De este modo, la agotada identidad, hecha de máscaras y pantallas, defensas, prejuicios y opiniones, y que, apoyada en ideas y palabras, imagina ser cierto tipo de identidad (en un sociedad de entidades semejantes), puede desaparecer de repente, disolverse en un flujo sin forma en donde conceptos como "muerte" y "vida", "tiempo" y "espacio", "pasado" y "futuro" carecen de significado. Existe tan sólo el fulgor nacarado del Vacío, de lo Increado, sin principio y, por consiguiente, sin fin.

Peter Mathiessen
El leopardo de las nieves

Anónimo dijo...

A esto le llamo yo: "Sanar la vida a través de la mente".

Para mí los sueños son importantísimos. Junto con Dios, los Orixás, mi amiga y mi amigo son la base de mi vida y casi, casi mi método de defensa personal. Con alguna técnica aplicada, eso sí, cuando necesito resolver algún problema y no encuentro el sueño. Y conste que es mi método, pero que lógicamente no tiene por qué ser el de los demás.
Y digo esto, porque (después de mucho tiempo de estudio y trabajo en el tema) yo si que interpreto mis sueños y los de mi gente. Y salvo alguna excepción (esto no es ciencia aplicada), las comparaciones que ponen (que dice TAHI) son rigurosas y responden exactamente a la realidad de tu vida.
Si les haces caso, solucionas la mitad de los problemas que se te presentan. O por lo menos sabes de donde proceden. Otra cosa es que tú quieras luego solucionarlos.
Esto es lo que mi amiga llama "el poder onírico del pensamiento".
¿Se han puesto a pensar que es tu mente la que sueña y tu pensamiento cifra eso que ve en tus sueños?.
Pues esto es la base de lo que por tu cerebro pasa en la fase ALFA o en la fase REM de tu sueño. Más allá de estas fases, creo yo, que ya la masa cerebral entra en un estado parecido al de la anestesia terapeútica.

"Si solucionas la realidad presente con la interpretación de la parte onírica de tu mente, has resuelto el mayor lazo que la vida te puede tender:
El lazo de unión entre tu mente y tu pensamiento".

Y ahora les dejo un par de citas de algo que llegó a mis manos recientemente y que dice:

"Solamente LIBRES las personas son capaces de amar".
"Respeta el derecho de las personas de volar rumbo a sus sueños".

Rocío del Alba
11 Febrero 2009