viernes, 4 de enero de 2008

Otras miradas

Durante mucho tiempo, muchos de nosotros tuvimos una única mirada desde la que acercarnos al mundo. Era la mirada que heredamos. La mirada que construimos, sin saberlo, a lo largo de los años de nuestra vida.

Y esa mirada era diferente de la de los demás. A veces, nos sorprendía que viéramos algo radicalmente diferente de lo que veía otro. Donde uno veía azul, otro veía verde. Donde uno veía ruinas, otro veía futuro. Pero no le dábamos demasiada importancia. Nuestra mirada era nuestra. Nuestra mirada era la verdadera. La del otro...

Y sucedió un día que alguno de nosotros empezó a viajar. Empezó a cultivarse. Empezó a dudar de la veracidad de su mirada. ¿Por qué nuestra mirada tenía que ser la verdadera?. ¿Quién nos lo aseguraba?. ¿Quién nos aseguraba que la realidad, diferente, que percibíamos, era única?.

Y al viajar exteriormente, empezó a viajar interiormente. Empezó a entender...que había otras miradas. Que había otras formas de ver la realidad. Que la realidad no era única. Y que solamente había que trabajar interiormente, para descubrir que...otras miradas estaban también dentro de él.

Que no tenía una sola mirada para entender la realidad. Que tenía infinitas miradas. Y que podía desarrollarlas. Sólo tenía que...mirar hacia dentro...y...buscar...con qué gafas quería ver cada día el mundo...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

LA MIRADA

Los seres vivos percibimos el entorno que nos rodea a través de los sentidos . Entre ellos , la vista , es uno de los más importantes y precísos . Pero nuestra mente puede condicionar los sentídos y hacer que interpreten algo que no se corresponde con la realidad del momento . Esto puede ser por enfermedad , accidente , ... o por decisión personal . Y lo que entonces vemos es lo que queremos ver , no lo que está sucediendo .... ya se sabe que en lo referente a la vista , todo depende del color del cristal con que se mira ...

Pero todo esto no esconde la realidad , podemos mirar con la vocación que queramos y podemos tratar con nuestra mente de forzar las circunstancias de nuestro mirar ... pero la realidad siempre estará ahí ... inmutable ... mal que nos pese . Por lo tanto es importante entrenarnos para ver esta realidad y saber afrontarla con el espíritu necesario para ello . Ahí es donde tiene que actuar el cerebro , ... en ayudarnos a interpretar lo que vemos para dar una respuesta adecuada , sin distorsionar la información de orígen .

Fdo.- Argonauta.

Anónimo dijo...

Electra. ¿Tú has oído alguna vez decir que el Sol tiene gafas?. Pues las tiene.

Compara el sol con la realidad y mira a ver que color de gafas usaría el sol para ver la realidad cada día. Y utiliza tú las mismas.

Os aseguro que el pensamiento y la imaginación se arropan con el calor, pero nunca se queman. El color de sus "gafas" los protegen. En todo caso, morenean, pero nunca se queman.

De Ilusión también se vive. Y se viven muchos, muchos años. Os lo digo yo que tengo muchos.

El Sol es el gran astro que rige el Universo, y tiene un rayo para cada persona, de un color diferente.
Pues identifiquen al Sol con Dios y piensen en la mirada de Dios. Si Dios mira la realidad de una forma inteligente, nosotros tendremos que tratar de hacer lo mismo. Por algo dice SEAM... que tenemos un espíritu que evoluciona hacia Dios ¿no?.

Por cierto SEAM muchas gracias. Tus comentarios han venido que ni pintados a mi alma y a mi mente.

Fdo: Ilusión
10 Enero 2008

Anónimo dijo...

UN PUNTO DE VISTA

Este trabajo se puede enfocar desde 3 puntos de vista. Igual que Albert Szent-Gyorgi, premio nóbel de medicina por la rama de fisiología, enfocaba normalmente sus trabajos. Yo soy una admiradora incondicional de sus teorías.

Uno de esos tres puntos de vista podría ser el siguiente:

Cuando nacemos lo hacemos con una mirada prestada (no heredada), que es la que mira por nosotros el primer tiempo de nuestra vida, cuando físicamente ni siquiera vemos. Cuando como dicen los científicos nuestro cristalino está velado y nuestro iris escondido detrás de un "tul" que nos protege de la mala vida que nos encontramos en este mundo. Teniendo en cuenta que esas imágenes van a quedar grabadas en nuestro subconsciente y que yo creo que son las que rigen nuestros sueños durante buena parte de nuestra vida.
Cuando se cae el "tul", ya nos hemos acostumbrado a que miren por nosotros, y ahí están nuestros progenitores (entre otros y en el mejor de los casos), que nos enseñan como es la vida a su manera. Como miran sus ojos las cosas que te rodean, Y les van poniendo sonidos y nombres. Nosotros nos dejamos llevar, nos acostumbramos, interiorizamos los conceptos y nuestra mente asimila y asocia. Es como un juego de Lenguaje-Pensamiento:

Mirada-Objeto-Nombre-Concepto.

por ejemplo:
¡Os habéis preguntado alguna vez por qué el pan se llama pan?. Yo muchas veces.
Pues sencillamente porque así nos lo miraron, así nos lo repitieron, así nos lo enseñaron y nosotros muy cómodamente lo asimilamos. Y así será por todo el tiempo.
Si trasladan esto a otro plano, resultaría que nuestra mirada ni la construimos, ni la heredamos, más bien la aprendimos y la asimilamos.
Por lo tanto nuestro mirar puede ser diferente, pero nunca único, porque no es solo nuestro. Otra cosa es la forma como se mire.
Incluso dormida, miras tu subconsciente y en ello ves una realidad que es la que detrás de tu cristalino se fabrica, pero: ¿Será la misma que la realidad consciente?. ¿Qién te asegura a tí qué si?. ¿Y quién te asegura que no?. Muchos filósofos han escrito sobre el tema y nunca se han puesto de acuerdo.
Traslademos esto a un plano más consciente y preguntémonos:
¿la realidad qué yo veo, es la realidad verdadera?.
Exactamente no se si existen muchas realidades, o existen muchas formas de ver una misma realidad. (Aquello de la botella medio llena o medio vacía). Yo creo más en la primera, porque igual que el mundo no es único, ni el planeta es único, ni la vida de cada uno es única,... ¿por qué va a ser única la realidad de cada uno?.
Entonces si la realidad para mí es como yo la veo, ¿por qué para otro no puede ser como la vea él?.
luego, si hay infinitas realidades, también habrá infinitas formas de mirar esa realidad. Y creo que así también se es más feliz, porque uno se sale fuera de los estereotipos que existen fijados de antemano. Ya que para mirar la realidad: 1º hay que mirar su estereotipo y luego la realidad en si.


"Si juntas la realidad con la mente y no fijas límites precisos para separar esa realidad, que es de lo que parece, llegará un momento en que nada será real y:
¿Cómo diferenciar entonces lo falso de la realidad?.


Rocío del Alba
18 Enero 2008